La actriz más asesinada en pantalla

Fué la francesa Paula Maxa. Durante los años del cine mudo se especializó en papeles de victima, de tal forma que la apodaron "La sarah Bernhardt de la muerte". En su carrera fué 'asesinada' en 358 ocaciones. Fue sometida a una serie de torturas teatrales únicas en la historia: ella se le disparó con un rifle, un revólver, por el cuero cabelludo, estrangulada, destripada, violada, guillotinada, ahorcada, descuartizada, quemada, cortada además con instrumentos quirúrgicos y lancetas, cortada en ochenta y tres piezas con puñal, picada por un escorpión, envenenada con arsénico, devorada por un puma, estrangulada por un collar de perlas, y azotada. También fue puesta a dormir con un ramo de rosas, besada por un leproso, y sometida a una metamorfosis muy inusual, que fue descrito por un crítico de teatro: "Doscientas noches en una fila, se descompusieron en el escenario simplemente en frente a una audiencia que no cambiaría sus asientos por todo el oro en las Américas. La operación duró más de dos minutos durante el cual la joven fué transformada poco a poco en un cadáver abominable ". Continuará...